Los Relojes de Sol de Fresnillo.
Por Bernardo del Hoyo Calzada.
Al parecer Fresnillo tiene
dos relojes de sol, uno en el obelisco de Fresnillo y el otro en la portada del
Santuario de Plateros.
En el libro “Museo Mexicano”,[1]se
encuentra el artículo titulado “El
Mineral de Fresnillo” firmado por L. E. y sobre el Obelisco de Fresnillo,
nos dice:
“En la plaza principal, rodeada
de hermosas fachadas y balconearías, se hace diariamente el mercado, que esta
suficientemente provisto de los renglones de primera necesidad, y además hay
una plaza llamada del Maíz, donde se vende esta y toda clase de semillas.
Frente del antiguo y horroroso
mesón se entendía en otro tiempo un triste llano, que llamaban plaza: Esta
rodeado de frondosos álamos cuyo agradable verdor, semejante al de la
esmeralda, pueden envidiar los fresnos de la alameda de México; tiene varias y
bien formadas lunetas, que dan un asiento cómodo y bajo la sombra de los mismos
árboles a las gentes, y en el centro una hermosa fuente de agua dulce y
saludable, en cuyo centro una hermosa fuente de agua dulce y saludable, en cuyo
centro se eleva sobre una base cuadrada de cosa de tres varas, un gracioso obelisco
de piedra, que tendrá otras catorce varas de altura.
Esta obra fue ideada por el Sr.
Prefecto D. José Maria Linares, y delineada por D. Ciriaco Iturribarría, que
también ha dibujado las hermosas vistas del cerro de Proaño, que circulan
impresas en casi toda la república. Sobre la punta del obelisco se ve un globo
que sostiene un águila de oro, echada, que tiene su ala derecha, para denotar
como una veleta el rumbo que toma el viento; porque al impulso de este giran
perfectamente el globo y el águila. El pié del obelisco le sostienen, sobre el
basamento, cuatro figuras enigmáticas, que corresponden a las cuatro esquinas,
representando unas esfinges haladas del gusto egipcio. Las cuatro fases de la
pirámide corresponden exactamente a los cuatro vientos cardinales: por las del
Norte y el Sur, tiene dos cuadrantes con su respectivo gnomon, que designan las
horas en los días serenos; y por los lados de Oriente y Poniente, tiene así
mismo unas graciosas lapidas que determinan los grados de latitud y longitud en
que se encuentra el lugar.
Este monumento fue dedicado en
1º de Noviembre de 1840, a
la memoria del 16 de Septiembre de 1810, y en el se lee asimismo el nombre
siempre honorable del Sr. D. Francisco García, gobernador que fue de Zacatecas
en los años que rigió el sistema de federación, y por cuyos altos hechos serán
sus recuerdos entre estas gentes tan duraderos como el cerro de Proaño.
El agua que surte la fuente se
saca de un profundo pozo, abierto en la dura peña, a mas de 300 varas de
distancia, por la potencia de solo dos hombres, que metidos dentro de una
maquina la mueven la mueven con su propia gravedad, sin tener otro trabajo que
el que da subir una escalera que cambia de direcciones, unas veces adelante y
otras hacia atrás; pero a este trabajo solo se dedican los reos sentenciados a
las obras publicas”.
Actualmente el obelisco
tiene las siguientes inscripciones en las 4 fases:
1.- “Este monumento que es dedicado a la gesta heroica iniciada el 16
de septiembre de 1810. Fue inaugurado el 12 de Noviembre de 1833. AFEHYAC. A.
C. (Asociación Fresnillense de Estudios Históricos y Actividades Culturales,
Asociación Civil.).
2.- Este Obelisco fue delineado y construido por el Sr. Ciriaco
Yturribarria y donado por el Prefecto Político Sr. José María Linares sin
gravamen de los fondos públicos al pueblo de Fresnillo.
3.- Siendo Presidente de la Republica el Excelentísimo Sr. General Antonio
López de Santa Ana y Gobernador del Estado el Sr. Don Francisco García Salinas.
4.- Situación Geográfica.- Latitud 23º 10` 35`` - Norte longitud 102º
52`39``- Oeste declinación Magnética 10º 33`- La distancia
en línea recta de la ciudad a algunos puntos de importancia geográfica son: al
Meridiano de Greenwich 10,510
km.- al Polo Norte 7,424 km.- al Ecuador 2,574 km. – al Trópico de
Cáncer 30 km.
Mi amigo y compañero de AFEHYAC,
don Carlos López Gámez, ha publicado en el periódico Imagen Zacatecas (Fresnillo),
lo siguiente:
El Obelisco, a punto de
desaparecer
Carlos López Gámez 13 Apr 2013 03:20:00
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Un 12 de noviembre
de 1833 con la solemnidad que el acto requería se inauguró oficialmente el
Obelisco. El monumento fue dedicado a la gesta heroica iniciada el 16 de
septiembre de 1810. La columna de piedra y cantera es semejante a las
egipcias. El proyecto que diera paso a una fuente y Obelisco data del año
1832.
El espacio donde se levantó el monumento, fuente y jardín, de acuerdo a las escuetas referencias históricas se utilizaba como tianguis popular al cual concurrían comerciantes de toda la región a vender sus productos da la creciente población minera. Se le llamaba: “Plaza del Maíz”. Se contaba además con una fuente de agua para abastecimiento, incluso hasta existía una modesta plaza de toros con tendidos de madera. Los comerciantes traían de otras latitudes sus productos, llegaban a Fresnillo conduciendo sus carretas y carretones tirados por bueyes y se alojaban en el Mesón de Arrieta (central de autobuses rurales, pensión de automotores por la calle Morelos). Don Augusto Isunza Escoto, primer cronista de Fresnillo, difunde una leyenda con relación al solar donde se levantó el Obelisco. Cita que: Fray Gerónimo de Mendoza ofició en ese lugar la primera misa luego de haberse impuesto el primer nombre propio a este paraje como: Ojos de Agua de Fresnillo. En más, añade que hasta se esculpió años después una columna de cantera para conmemorar el acontecimiento. Algo parecido a una cruz atrial y/o columna de ángeles. Misma que se transportó después al atrio de la Purificación, luego al interior del Panteón de Santa Teresa. Desde 1961 se encuentra en el atrio del templo de Santa Ana. Regresando al Obelisco, este fue construido debidamente orientado hacia uno de los puntos cardinales. Tiene un reloj de sol al sur y norte, además tenía una veleta en la parte alta. Otra leyenda reseña que: “Era un águila imperial de oro” en lugar de veleta. La base de la columna tenía algo parecido a un atril de cantera con páginas abiertas donde aparecían datos de la ubicación geográfica de la ciudad. Esta es una parte de la reproducción textual: Lado oriente: "Este monumento es dedicado a la gesta heroica iniciada el 16 de septiembre de 1810, inaugurado el 12 de noviembre de 1833". Este emblemático monumento y jardín, como suele ser la costumbre de diversas autoridades locales en El Mineral, de antaño y de hogaño, se le utilizaba como polígono a donde se centran todo tipo e infinidad de agresiones, irreverencias y obviamente, destrucción. Enseguida uno de tantos ejemplos: En 1930, siendo presidente municipal Bruno Hernández el Obelisco estuvo a punto de ser demolido. Una descarga eléctrica le causó serios daños en su estructura, percance que fue aprovechado por varios dizque “respetables ciudadanos”, para imponer sus ocurrencias y caprichos. La junta administrativa del Hospicio José González Echeverría envió una misiva al Departamento de Bellas Artes solicitando la demolición del monumento. El documento fechado el 10 de noviembre de 1930 aparece en la correspondencia privada del alcalde, un irrefutable testimonio. La respuesta se da un mes después. La firma del doctor Alt aprobando la petición, textualmente cita, “El Obelisco que levantó un particular en el Jardín de Fresnillo, Zac., conocido como Jardín del Obelisco… no hay inconveniente en terminar la demolición principiada por una descarga eléctrica”. Así de tajante y categórico el dictamen condenatorio. La comunidad libre reaccionó de inmediato. Se opusieron con energía y virilidad a la demolición y se salva el histórico monumento. Sin embargo, que cerca estuvimos de perder el Obelisco como ha estado ocurriendo con otras tantas cosas que en tiempos actuales se destruyen de manera impune. En la administración de Guillermo Errecalde Novoa como presidente del Consejo Municipal, el jardín y columna fueron objeto de una restauración y remodelación general. Se retira la balaustrada circundante, se construyen dos fuentes ornamentales con piedra volcánica y se instala un novedoso alumbrado mercurial. El presidente de la República, Adolfo López Mateos, inauguró la nueva imagen del jardín Obelisco. Varios años después, en 1966, siendo alcalde Heriberto González García, se adapta una fuente de agua en torno a la columna y se cubre con cemento la base donde aparecían las coordenadas y datos geográficos de la ubicación de la ciudad. Estas obras causaron severos daños al Obelisco. En 1954, en la columna se coloca una efigie de Manuel M. Ponce, evento que fue parte del programa general del IV Centenario de la ciudad. La efigie de bronce después se retiró y se colocó en el interior del teatro Echeverría, donde supongo que todavía existe. En 1979 AFEYHAC interviene para rescatar el monumento y gestiona ante J. Jesús Salas Trejo, alcalde interino, y ante el ingeniero Justo Wong Salinas, gerente de la empresa minera, la reposición de las leyendas inscritas en la base del Obelisco. Para ello se colocan placas metálicas que reproducen íntegramente las inscripciones originales. El evento fue un 12 de noviembre de 1979. Los tiempos recientes y actuales observamos con indignación que el Obelisco sigue marginado y condenado a su extinción. Se encuentra como el centro histórico, invadido totalmente por el tolerado y protegido comercio informal y derivados. |
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Siempre han hecho de este lugar algo diferente: López Gámez
12 Oct 2014 20:25:54
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El Jardín
Obelisco siempre ha sido un lugar de encuentro. (Norma Bernal)
El obelisco fue
construido en el siglo 19. (Norma Bernal)
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El Jardín Obelisco es uno de los lugares de mayor
tradición para los fresnillenses, ya que representa un punto de encuentro.
Sin embargo, muchos desconocen que la historia de este monumento inició en el siglo 18. El miembro de Centro de Investigaciones Históricas del Centro de Fresnillo, Carlos López Gámez, precisó que en un principio este sitio era conocido como la Plaza del Maíz. “Era un tianguis gigante, llegaban a la plaza cientos de productores del campo, quienes entraban en su carretas jaladas con mulas o caballos y se colocaban en el lugar para vender sus productos”, dijo. Luego fue utilizado como plaza de toros y estaba construido con madera, la finalidad era siempre la misma, congregar a la ciudadanía. Pero en el siglo 19 el gobierno de Francisco García Salinas, entre 1830 y1834, ante las constantes quejas de quienes vivían cerca del lugar por los montones de basureros y los asaltos que se suscitaban, decidieron darle otra utilidad. “Surgió el proyecto de hacerlo jardín como un atractivo y se aprovechó para realizar un obelisco e inaugurarlo durante el 23 aniversario de la Independencia de México en 1833”, narró López Gámez. El Obelisco es una base con una columna de cuatro lados tallada en cantera, se le colocó una leyenda que hace referencia de la ubicación de Fresnillo con medidas y coordenadas. “También se podían apreciar las personalidades políticas que en ese momento tenían cargos, se leía el nombre del presidente de la República, Antonio López de Santa Ana; el gobernador, Francisco García Salinas; el jefe político, Alberto Linares y el arquitecto que lo construyo, Ciriaco Iturribarria”, explicó. El jardín fue cerrado con barandilla, lo que disfrutaban los padres al llevar a sus hijos, pues no corrían riesgos. En otro gobierno se decidió que era buena idea hacer alrededor del obelisco una fuente, pero dañó parte de la columna y de la leyenda escrita, pues esta no era de cemento, sino de barro y cantera; se arregló y se colocó una placa de la leyenda otorgada por Minera Fresnillo y la fuente dejó de funcionar. En 1930 el Obelisco fue derrumbado por un rayo. Ante esta situación, directivos de la Junta de Administración del Hospicio de José González Echeverría enviaron una carta ante el Departamento de Bellas Artes de la Secretaría de Educación Pública para pedir autorización de demolerla y ahí colocar el busto de su beneficiario, pero fue negada. “A un mes de ser rechazada la petición por ser dedicada a una gesta histórica, la columna fue reconstruida. Después, en el jardín se colocó una nevería que por el día atraía a muchas personas, y por la tarde noche igual, aunque con otro fin, el de ingerir bebidas embriagantes”, comentó López Gámez. En los 60, el Jardín Obelisco aún tenía la barandilla, pero estaba muy descuidado. Una vez más, comentó el historiador, deciden rescatarlo, quitan la barandilla, construyen dos fuentes, una al oriente y otra al poniente para una mejor vista, tenía alumbrado de mercuriano y volvió a ser el lugar favorito de los fresnillenses. “Siempre han hecho de este lugar algo diferente según el gobierno en turno, por lo que no tardaron en hacer otro cambio que fue la subida de piso, quitar las fuentes de costado y dejar solo la columna de la fuente que se hizo en el Obelisco” explicó el investigador. |
[1] Museo Mexicano. - Tomo I. Págs.
206 a la216.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
Reloj de sol del Obelisco de Fresnillo, Zac. Fotografía: Bernardo del Hoyo Calzada. 28 de Febrero de 2015.
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